Hai excomunion… Contra ladrones de libros, pergaminos o papeles.
Lo cierto es que podría pasar por un recuerdo más, escondido entre los regalos que las tiendas salmantinas venden a visitantes y curiosos…
Y también es cierto que es una de esas placas que, por tamaño y forma, podría ocupar mesas, estanterías e incluso frigoríficos sujetando la lista de la compra.
Pero este aviso medieval, cuyo original está custodiado en la Biblioteca Histórica de la Universidad de Salamanca, es toda una Cédula Papal de Excomunión contra aquel que osara robar alguno de los libros o manuscritos de la institución universitaria salmantina.
Así en las «rinconadas» de la Biblioteca Histórica de la Universidad de Salamanca, puede ser buscado y leido, entre las maravillosas librerías gobernadas por cientos de libros.
Su utilidad cayó, con el paso del tiempo, pero en el siglo XVIII regresó para velar por los tesoros de la tercera biblioteca nacional más importante.
Hai excomunion
reservada a su santidad
contra qualesquiera personas,
que quitaren, distraxeren, o de otro qualquier modo
enagenaren algun libro,
pergamino, o papel
de esta bibliotheca,
sin que puedan ser absueltas
hasta que esta esté perfectamente reintegrada.
